CIUDADES VISITADAS
Las principales ciudades por la que atraviesa la ruta del Transiberiano son:
MOSCÚ
En Moscú todo es a lo grande: es la ciudad más cara del planeta y, según datos recientes, la más violenta; acoge el mayor número de multimillonarios y el precio del café es un bar tampoco encuentra parangón. Otra cosa es la realidad de sus ciudadanos, o su vitalidad. Relativamente libre de los problemas de la censura y económicos, la capital rusa experimentando un estallido de creatividad. Las antiguas fábricas y almacenes se han convertido en rabiosas galerías de arte, mientras los clásicos, como el Museo Pushkin de Bellas Artes, están en plena explotación y experimentación .Chaikovski y Chéjov se siguen representando, pero también puede asistirse a estrenos internacionales de nuevos componentes y coreógrafos. Hay locales especializados en vino, café, cerveza o sushi, y la oferta nocturna comprende clubs exclusivos, cafés artísticos bohemios, garitos con blues en vivo y bares de copas. Moscú es también un tesoro histórico.
Las torres del Kremlin señalan el punto de su fundación y sus iglesias y monumentos recuerdan a los héroes caídos y las batallas ganadas. Por su parte, los restos del Estado soviético se reparten por toda la ciudad. Incluso la historia está siendo experimentada de forma innovadora, con nuevos museos que se ocupan de temas hasta hace poco tabúes. La capital también está experimentando un incremento natalicio sin precedentes. Desde el arte y la historia hasta la recreación y la procreación, Moscú es, sin duda un hervidero de sorpresas.
IMPRESCINDIBLE
Presentar los respetos a Vladímir llich en el mausoleo de Lenin
Visitar la Plaza Roja, el Kremilin y la armería
Admirar la mayor colección del mundo de arte ruso de la Galería Tretiakov
Perderse por el metro de Moscú y visitar el convento y cementerio de Nocodevichy
KAZÁN
Kazán que significa “olla” en tártaro, es la Estambul del Volga, un lugar en el que Europa y Asia se miran con curiosidad desde los campanarios de sus iglesias y mírateles. Más antigua que Moscú (unos 150años) la ciudad celebró su milenio por todo lo alto en el 2005.Es la capital de la republica de Tatartán, la tierra de los tártaros del Volga. Este pueblo suele asociarse con las hordas de Gengis Kan, aunque ellos prefieren identificarse con el antiguo Estado búlgaro del Voga, que fue destruido por los mongoles. La autonomía de Tatarstán no se reduce a los indicadores bilingües de la calle (con el tártaro siempre por encima del ruso) sino que también asegura que la mayor parte de los beneficios procedentes de las inmensas reservas de petróleo se queden en la república, cuya economía está experimentando un importante auge. El renacer cultural postsoviético, plasmado en la popularidad de la actual moda musulmana y de la literatura de la lengua tártara, se mira con recelo desde Moscú, que recientemente prohibió el tan anhelado cambio alfabeto cirílico por el latino. El nacionalismo tártaro es fuerte pero no radical, y el islamismo que se participa es muy moderado. Aproximadamente la mitad de la población es de etnia rusa, pero las tensiones radicales son poco frecuentes. Después de todo como dice el refrán “Rasca a un ruso y aparecerá un tártaro, también funciona al revés.
YEKATERINBURGO
Fiebre de las gemas, mitología minera, ejecución de los Románov, ascenso de Yeltsin, contiendas entre bandas de la década de 1990: Yekaterinburgo es la capital política de los Urales, rebosante de historia y cultura. Por otro lado, su crecimiento económico se hace evidente en el auge de restaurantes, el tráfico constante y la escasez de alojamientos de precio razonable. Al contar con uno de los mejores aeropuertos internacionales de Rusia y con un par de agencias experimentadas en el trato con extranjeros, Yekaterinburgo es una buena base para explorar los Urales.
LUGAR DE EJECUCIÓN DE LOS ROMÁNOV
La noche del 16 de julio de 1918, el zar Nicolás II, y su mujer y sus hijos fueron asesinados en el sótano de la casa de un ingeniero local, conocida como Dom Ipatyeva (bautizada así por su propietario, Nikolái Ipatiev). Durante la época soviética, el edificio albergó un museo local de ateísmo pero fue demolido en 1977 por el entonces gobernador Borís Yeltsin, temeroso de que pudiera atraer a simpatizantes monárquicos.Hoy el lugar está marcado con una cruz de hierro que data de 1991 y una segunda cruz de mármol de 1998, año en el que los restos de los Románov fueron enviados a San Petersburgo para enterrarlos en el mausoleo familiar. Actualmente el lugar está dominado por la enorme iglesia sobre la Sangre de estilo bizantino aunque mucha gente piensa que los fondos, que costó se podrían haber invertido mejor, su razón es honrar a la familia Románov elevada a la categoría de santa. También se rumorea que la iglesia alberga el icono más caro de todo el país.
Cerca está la bonita capilla de la Reverenda Mártir Gran Duquesa Yelizaveta Fiodorovna, que recuerda a la tía abuela de la familia imperial. Tras el asesinato de sus parientes, esta monja tuvo un final mucho peor: fue arrojada a un pozo, gasificada y enterrada.
CON UN PIE EN CADA CONTINENTE
Hasta hace poco, si alguien quería poner un pie en Europa y en otro en Asia, tenían que ir a 40km al oeste de Yekaterinburgo hasta la frontera euroasiática. Erigido en 1837 a una altura de 413m en los Urales locales, el hito era un lugar muy popular donde los recién casados se fotografiaban y filmaban.
En un intento por hacer este punto geográfico más accesible para los viajeros intercontinentales, la ciudad ha erigido un nuevo marcador fronterizo en una ubicación mucho más conveniente (a solo 17km de Yekaterinburgo ) y con un aspecto de una Torre Eiffel en miniatura. Hay muchos planes para crear monumentos, museos, parques, tiendas de regalo y restaurantes europeos y asiáticos en sus lados continentales respectivos. Los escépticos deben saber que este punto es mucho más que una unión simbólica entre Oriente y Occidente. Un grupo de científicos que examinaba los registros geológicos y los patrones de flujo de agua confirmó el lugar en la línea divisora de aguas de los ríos Iset y Chusovaya. La unión de continentes es real. Se puede ir en taxi desde Yekaterinburgo u organizar una excursión.
IRKUTSK
Esta sórdida ciudad histórica, la más grande y cercana al glorioso lago Baikal (a 70km), está 1.090 km al sudoeste de Krasnoyarsk. Con algunas iglesias imaginativamente reconstruidas y una arquitectura decimonónica. Irkutsk se han convertido en la parada más popular de la ruta ferroviaria transiberiana entre Moscú y el Pacifico. Fue fundada en 1651 como una plaza fuerte cosaca para controlar a los originales pobladores buriatos. Durante el s.XXIII, fue el punto de partida de las expediciones hacia el norte y el este, incluida Alaska, entonces conocida como el “distrito americano de Irkutsk”. Al ser centro comercial y administrativo de Siberia oriental, desde Irkutsk se enviaban pieles y marfil a Mongolia, Tíbet y China a cambio de seda y de té. Un 75% de la ciudad desapareció en el devastador incendio de 1879, sin embargo gracias a la fiebre del oro de la década de 1880, en la cuenca del Lena rápidamente se restauraron las grandiosas mansiones de ladrillo y edificios públicos. Conocida como la “Paris de Siberia”, la urbe no recibió bien las noticias de la Revolución de Octubre. Los mercaderes adinerados no sucumbieron con la marea roja hasta 1920, cuando se capturo y se ejecutó al almirante Kolchak del Ejército Blanco de quien se erigió en el 2004 una controvertida escultura. La planificación de la era soviética convirtió la ciudad en un centro industrial y científico y afectó a su crecimiento descontrolado que todavía continua.
ISLA OLKHON
Aproximadamente en el medio de la orilla oeste del lago Baikal se encuentra Sakhyurta (también conocida como MRS). Desde allí un corto trayecto en trasbordador traslada al viajero a esta tranquila isla, un lugar maravilloso desde donde disfrutar del lago y relajarse. Los buriatos la consideran uno de los cinco polos globales de energía del chamanismo. El principal asentamiento de la isla, que tiene 72 km de largo, es Khuzhir, que ha experimentado cierto auge turístico con los últimos años gracias fundamentalmente a los esfuerzos realizados por la Nikita’s Guest House. Hay un buen mapa de la isla en la página web de Baikal Explorer.
ULAN-UDÉ
La atractiva capital de Buriatia está 456km al este de Irkutsk y es una buena parada antes de visitar Mongolia o el este del lago Baikal. Fundada en 1775 con el nombre de Verjneudinsk, la ciudad prosperó como una de las paradas principales en la ruta de las caravanas del té que partían desde China vía Troitskosavsk (actualmente Kyakhta).Ulan significa “rojo” en buriato, aunque la ciudad es de un agradable tono verde, enclavada entre montañas. A pesar de la inevitable excursión al modo soviético, sigue siendo una de las ciudades más bonitas del este de Siberia.
ALREDEDORES DE ULAN-UDÉ
Lo más conocido son los datsani locales aunque incluso el de Ivolginsk, el más grande de Buriatia, es bastante pequeño y no impresiona tanto como sus homólogos de Tsugol y Aginskoe, en la región de Chita. El datsan de Tamchinski (160km al sur del Ulan-Udé en tren) fue fundado en 1741 como el primer monasterio budista de Buriatia. El original fue destruido en la década de 1930; la reconstrucción a pequeña escala está rodeada por el moribundo pueblo de Gusionoe Ozero (30 km al sur de Gusinoozersk).
Se recomienda ver también la renovada escuela de filosofía, experimentar la sorprendente acústica del templo principal y charlar con el lama principal, quien a cambio de un donativo permite acampar en el recinto y comer en el pequeño refectorio. El datsan de Atsagat fue el centro de la erudición bautista buriata y tiene un importante scriptorium. En el Museo de Literatura de Buriatia de Ulan-Udé se muestran bellos ejemplares de los manuscritos de Atsagat. Como el templo Tamchinski, fue completamente destruido en la década de 1930, pero ya se ha recuperado y hoy alberga el reducido Museo Ayvan Darzhiev en memoria del monje Atsagat consejero clave del 13 Dalai Lama.
VLADIVOSTOK
A primera vista, Vladivostok deslumbra como una especie de “San Francisco rusa”, con escarpadas montañas que dominan un conjunto de bahías, de las que destaca la del Cuerno de Oro (con su parecido a las de Estambul). Más de cerca la ciudad puede resultar un poco gris, con bloques soviéticos atrapados entre nuevas urbanizaciones y mansiones centenarias. Sin embargo, es un buen lugar donde terminar o iniciar la ruta transiberiana, aunque con una advertencia: las piernas poco habituadas a las calles empinadas dolerán más que el trasero en el tren. Vladivostok se enfrenta a grandes retos inminentes. Teniendo en cuenta su reciente historia, con fondos públicos esfumados y alcaldes encarcelados (Vladímir Nikolayev fue condenado a 4 años de cárcel por corrupción a finales del 2007), la ciudad continúa intentando desprenderse de su corrupción de “Salvaje Este”. En cuanto al mejor momento para visitar la ciudad, el mes de junio puede ser gris y lluvioso, mientras que septiembre y octubre son a menudo los más soleados y agradables.